El
Nuevo Testamento afirma, que Jesús "resucitó de entre los muertos" (Hch 3, 15; Rm 8, 11; 1 Co 15, 20)
•Esto presupone que, antes de la resurrección, permaneció en la morada
de los muertos (cf. Hb 13, 20).
•Jesús conoció la muerte como todos los hombres y se reunió con ellos en
la morada de los muertos.
•Pero lo hace como Salvador proclamando la buena nueva a los espíritus
que estaban allí detenidos
•Jesús
no
bajó a los infiernos para liberar a los condenados, ni
para
destruir el infierno de la condenación sino para
liberar a los justos que le habían precedido.
•"Hasta
a los muertos les ha sido
anunciada la Buena Nueva ..." (1 P 4),
El descenso
a los infiernos es el pleno cumplimiento del anuncio evangélico
de la
salvación.
•
•Es la
última fase de la misión mesiánica
de Jesús
con esto, completa la obra redentora a todos los
hombres de
todos los tiempos y de todos los lugares porque todos los
que se salvan se hacen partícipes de la Redención.