¡Que gran regalo que nos has hecho Señor! Esta es la exclamación que se escucha por doquier en la Capilla Padre Pío de Adoración Perpetua. Y es que todas las personas nos hemos dado cuenta de que este tesoro maravilloso supera todas nuestras expectativas, al comienzo cuando empezó la anotación de los turnos, estábamos un tanto preocupados por la asistencia de los fieles de la Parroquia Santa Teresita, pues muchas veces no se alcanza a valorar que el compromiso es la representación gráfica de la fe que profesamos.
Hasta ahora en estos primeros 30 días, no ha habido día en el que nuestro amado Jesús presente en la Eucaristía se haya quedado solo, y no solo eso; es que nunca ha estado con menos de 5 personas en cualquier horario del día o la noche, siempre está custodiado por esas almas que anhelan un momento de intimidad con Él.
Le agradecemos mucho a nuestro Señor por darnos la oportunidad de permitirnos estar en su compañía para demostrarle nuestro amor, para alabarlo, para glorificarlo, y pedir por todas las necesidades nuestras y de los demás.
Si todavía no ha ido usted a la Adoración, le invitamos a hacerlo, para que pueda conocer un pedacito del cielo.
¡SEAS POR SIEMPRE BENDITO Y ALABADO, MI DULCE JESÚS SACRAMENTADO!
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